La primera,
Es que al sufrir de una proverbial amnesia
Olvide como alimentarse,
Sea avasallada por la mansedumbre de un mareo,
Escoja un dolor infinito y por último,
Deje en su acrisolado testamento lo siguiente:
“Ahí les dejo un vuelo apócrifo,
La ruta no escogida y mi proa desafectada
Acusando la colisión final
En la palma de una mano”.
La segunda,
Instálese la mano izquierda sobre la pierna desnuda
En forma vertical.
Espere a la mosca.
Por ser junio posa en el pedestal peludo y musculoso,
Sin olvidar que simplemente es una absurda mosca.
Coloque la mano derecha a quince centímetros de la izquierda,
Pero no a la misma altura,
Justamente hay que hacerlo
A partir de la parte superior de la otra,
Precisamente para infundirle dudas y fascinación.
Después,
Celebre sin pensar en las moscas
El concierto milenario de un excitante jaque mate
Y no se limpie las manos,
Porque la otra forma
(Cualquier otra)
De morirse una mosca,
Es el letargo súbito de un aire comprimido,
A doscientos kilómetros por hora,
Que asesina de absoluto pánico
A la más hábil de las moscas.
Si este recetario no conduce
A las honras fúnebres de la señora mosca,
Entonces acuda a un método menos retórico,
Poco convencional,
Un tanto repugnante pero efectivo e infalible:
Levante el pie derecho
(Por ser el más fuerte),
Déjelo caer con regulada velocidad y precisión,
De un par de giros
(Sin levantar el talón, preferiblemente),
Y no olvide
(Por ningún motivo)
Que acabas de cometer un mosquicidio premeditado.
viernes, 24 de diciembre de 2010
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2 comentarios:
Que calidad profe
INSTRUCTIVO PARA MATAR UNA MOSCA
Es un instructivo o una burla socarrona a la estupidez del ser humano??
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